La casita rural es una construcción diáfana a dos niveles, que separan la zona cocina-salón al dormitorio-baño y con techos muy altos con vigas vistas de castaño.
La puerta de entrada se accede directamente al salón-comedor (28.43m2) con suelos de baldosa de barro artesanal, techos muy altos con vigas vistas de castaño, ventanas con vistas al valle, estufa de leña y radiadores eléctricos.